Escuché a nuestra hija Lisa, de 12 años, y a su amiga Patty hablando de lo mucho que odian a dos niños de su clase. El odio es una emoción muy fuerte. ¿Por qué odian a estos niños? Lisa también dice estar enamorada de un niño de su clase.
R. Tengo sugerencias para ayudar a las niñas a identificar y aprender sobre sus emociones.
- Establezca un momento y un lugar para una conversación seria.
- Pregúnteles a Lisa y a Patty cómo se sienten cuando están cerca de los niños que odian. Pregúnteles qué les disgusta de estos niños. Tal vez los niños son demasiado ruidosos, se burlan o intimidan a las niñas. Es mejor identificar el comportamiento que les desagrada que etiquetar sus sentimientos como odio. En algún momento, su hija podrá decirles a los niños lo que le disgusta.
- Comparta con las niñas que gustar, amar y disgustar forman parte de un continuo. Todos tenemos personas, mascotas y lugares especiales que nos gustan, amamos o disgustan. La cantidad o profundidad de ese agrado, amor o desagrado, puede aumentar o disminuir de vez en cuando.
- Pídales a las niñas y a otros miembros de su familia que identifiquen sus sentimientos y describan sus emociones durante las comidas y en otros momentos del día.
- Compra un diario con candado para su hija. Anímela a escribir en el diario todos los días. Anímela a hablar sobre quién le gusta, a quién quiere y por qué.
- Pida prestados libros de la biblioteca sobre las emociones para leerlos y comentarlos con las niñas. Ejemplos: Soy más fuerte que la ira de Elizabeth Cole (especialmente para los niños más pequeños) o How to Master Emotions: Learn to Manage Emotions de Felicity Brooks. La amabilidad es mi superpoder de Alicia Ortego.
- Un juguete nuevo llamado: “Hand2Mind See My Feelings Mirror” ayuda a los niños a aprender a expresar las emociones deseadas. El niño ve una foto de un niño con una emoción determinada e intenta igualarla en un espejo.
A la mayoría de las niñas les gusta fingir que son princesas reales. Podría compartir que la Princesa Carlota de Inglaterra debe tratar a todos los demás niños por igual. De la misma manera, nunca debe haber señales externas de odio o simpatía por los demás. Pídales a las niñas que piensen y hablen sobre cómo pueden tratar a las personas por igual. Por ejemplo, incluir a todos los niños de su clase cuando regalen tarjetas o golosinas por el Día de San Valentín. Externamente, las niñas pueden intentar mostrar el mismo comportamiento hacia los demás, pero tener diferentes sentimientos internamente que resolver. Controlar los sentimientos ayuda a que nuestras vidas sean más fáciles y mejores. Es una buena madre por querer ayudar a su hija y a la amiga a aprender a identificar y expresar sus emociones.
Betty Richardson, PhD, RN, CS, LPC, LMFT, is an Austin-based psychotherapist.