P. Mi hija Emily tiene diez años de edad y no le gusta leer. La madre de Emily también evita la lectura y dice que no le gusta leer. Traté de animar a Emily a leer llevándola a la biblioteca para que sacara un libro. Siguió haciendo desidia y luego perdió el libro justo antes de la fecha en que se tenía que entregar. No puedo entender el no amar los libros. ¿Tiene alguna sugerencia para motivar a mi hija a leer?
R. Los niños son pequeños imitadores, observando y copiando lo que los padres hacen. Los hijos de padres que modelan el placer a la lectura son más propensos a amar la lectura. Los padres que dicen que odian la lectura y permiten que sus hijos evitar leer están cerrando una puerta para el éxito de su hijo/a. Sería maravilloso si su esposa pudiera ser un modelo de lectura para su hija, pero incluso si no, usted puede modelar su amor por la lectura. También puede hacer otras variedades de cosas para animar a Emily a convertirse en una lectora.
Leer en paralelo. Vea si a Emily le gustaría escoger un libro que usted puede leer y juntos dialogar. Puede revisar que los libros sean apropiados y encontrar buenas preguntas para su dialogo en commonsensemedia.org. Puede encontrar listas de libros para leer y más en goodreads.com. O revise la listas de libros de “Texas Library Association” Asociación Bibliotecaria de Texas en txla.org/reading-lists.
Intente un libro electrónico. Quizás un iPad u otro lector electrónico provocaran el interés de su hija. Nuestras bibliotecas públicas tienen una selección grande de libros electrónicos adecuados para niños de todas edades. Pero antes de comprar un lector electrónico, vea si puede pedir prestado uno de un amigo. De esa manera, puede devolverlo si Emily no le toma interés.
Explorar una librería. Lleve a Emily a una librería para explorar. La gran cantidad y variedad de libros y revistas podrían proporcionar a Emily con un tema que le fascine.
Deje que tome la iniciativa. Anime a su hija a ser curiosa y a leer sobre las cosas por las que siente curiosidad. Deje que planee una excursión e investigue lugares para visitar y cosas que hacer. Sugiérale tener un pasatiempo o interés y de leer para aprender sobre él. Pregúntele si quiere formar parte de un club de lectura o ayúdela a organizar uno nuevo, que incluye invitar a sus amigos, la elección del libro y escribir las preguntas de discusión.
Considere la posibilidad de un tutor. Emily podría necesitar un poco de ayuda con sus habilidades en lectura. Solíamos pensar que por el cuarto grado, la mayoría de los niños habían dejado de aprender a leer y empezaban a leer para aprender. Pero nuevas investigaciones muestran que incluso los niños de quinto grado y más allá todavía están perfeccionando la habilidad. (Vea time.com/3015497/learn-to-read-past-fourth-grade.)
Fomentar la lectura durante todo el año. Es importante para Emily leer durante las vacaciones escolares y las vacaciones de verano. Los maestros me dicen que no sólo los niños se atrasan si no leen en el verano, pero también no se ponen al día con los niños que si lo hacen.
La capacidad de lectura tiene mucho que ver con el éxito en la escuela y la vida. Los niños deben leer para entender los pro-blemas de matemáticas, estudiar idiomas extranjeras, seguir una receta y aprender las reglas de los deportes. “Las habilidades de lectura son el mejor indicador del éxito actual y futuro de los estudiantes,” dice el sito web de la Asociación Nacional de Directores de Escuelas Secundarias. “Un estudio reciente indica que las habilidades de lectura son el mejor predictor de éxito en el futuro y el poder de generar ingresos.”
Estas son sólo algunas ideas para conseguir que Emily lea. Estoy seguro de que esta lista le inspirará a subir aún más. Confío que tendrá éxito en apoyar a su hija para poder convertirse en una lectora de por vida.
Betty Richardson, PhD, RNC, LPC, LMFT, es una psicoterapeuta situada en Austin que se especializa en ocuparse de los problemas de niños, de adolescentes y de padres.
¿Tiene una pregunta para Betty Richardson? Envíanos un email aquí y es posible que veas la respuesta en un próximo número.