El desarrollo de la alfabetización ha sido especialmente difícil de fomentar durante la pandemia. El acceso a las bibliotecas se redujo drásticamente y cuando la instrucción virtual era la única forma disponible, la fonética y otros aspectos técnicos de la lectura eran muy difíciles de transmitir. Con los estudiantes actualmente en las escuelas, las máscaras aún dificultan que las conexiones de sonido y símbolo sean explícitas para los niños. En general, existe el deseo de ponerse al día en alfabetización y los padres pueden ayudar.
Lo mejor que pueden ofrecer los que no son expertos en alfabetización, es llenar la vida de los niños con el placer de la lectura. La pandemia iluminó algunas innovaciones notables a nuestra disposición. La revolución digital ha ampliado drásticamente nuestro acceso a la impresión digital y los libros de imágenes, con muchas opciones gratuitas. Muchos sistemas de bibliotecas públicas permiten sacar libros electrónicos, y nuestros amigos de bookspring.org han compilado sitios web de todo el mundo que ofrecen acceso gratuito a libros en una multitud de idiomas. Algunas de estas ofertas permiten leer voces en voz alta, resaltar texto y otras funciones.
Ofrezco dos sugerencias si deseas que la lectura de libros electrónicos sea parte de su rutina. Primero, manténgansen enfocados en la historia o el texto. Resistan la tentación de hacer clic en “huevos de Pascua”, esos elementos que cuando se hace clic, animan o le hablan al lector. Mantengan la historia al frente y al centro y guarden los huevos de Pascua para más tarde. En segundo lugar, si leen en los dispositivos antes de acostarse, atenúen la pantalla, incluso hasta el punto en que necesite una luz en la habitación para ver el texto. Quieres que tus hijos se relajen, y las pantallas a máxima potencia pueden tener un efecto contrario y no deseado.
¡Feliz año nuevo de parte de Austin PBS!
Benjamin Kramer, PhD, es el director de educación de Austin PBS.
