P. Mi marido empuja a nuestros hijos (10 y 16) e hija (12) a sobresalir en los deportes. Él entrena a algunos de sus equipos, y cuando no está entrenando, él es ese tipo gritándoles a los niños y al árbitro. No los deja salirse. Espera que consigan becas deportivas para la universidad. ¿Hasta qué punto es considerado demasiado?
R. ¿Ha considerado que su marido podría estar viviendo sus propios sueños? Él podría estar viviendo vicariamente a través de sus hijos.
En un estudio de investigación en los Países Bajos en la Universidad Utrecht vieron este concepto. En el estudio se encontró que entre más ve un padre en su hijo una extensión de sí mismos, es más probable que el padre espere que su hijo “cumpla sus propias ambiciones no realizada”. ¿Pudiera ser, que al negar a sus hijos la oportunidad de elegir actividades entorno a sus propios intereses, crean hijos adultos que—como él—terminan teniendo ambiciones no realizadas?
A veces los hijos desarrollan intereses que sorprenden a los padres. Estos intereses pueden conducir a sobresalir en una profesión que ninguno de los padres habría elegido para su hijo. Por ejemplo, el arquitecto para el Estadio Olímpico de Tokio 2020 se interesó por la arquitectura cuando, siendo niño, vio un edificio que hizo una impresión duradera en él. En ese momento, ni siquiera conocía la palabra “arquitecto”, pero él decidido que iba a construir edificios. Sus padres no impidieron su sueño, y hoy él es un arquitecto de fama mundial.
Una buena pregunta que debe hacerse es, “¿Cómo puedo asegurarme de que mis hijos lleguen a seguir algunos de sus sueños y no sólo mis sueños?” Aquí están algunas sugerencias:
Escuche a sus hijos para descubrir sus intereses y ayudarles a aprender y hacer más en su área de interés. Una de las mejores madres que conozco, descubrió que a su hijo le interesaban los coches deportivos y coches inusuales. Por lo que ella y su marido llevan a su hijo a muchos lugares a ver coches y le ayudan a investigarlos. ¿Continuará este interés hasta convertirlo en una carrera o un pasatiempo de por vida? Nadie lo sabe, pero su familia le está ayudando a seguir su pasión por los coches.
Haga algo acerca de sus propios intereses que no pudo seguir en el pasado. Tome clases de piano, escriba un libro, estudie artes marciales o tome clases de arte. Haga algo para realizar sus propios sueños y metas incumplidas.
Si usted tiene que elegir actividades para su hijo, limítese a elegir una o dos pero también deje que su hijo tenga una de su elección. Envíe a su hijo a un campamento de verano que tenga que ver con uno de sus intereses. Permita que su hijo tome clases en arte o música, o que entre en un club.
Interese mutuos pueden proporcionar una unión positiva entre un padre y un hijo. En el momento en que usted empieza a empujar e incluso forzar a un hijo a vivir sus sueños no realizados, es cuando pueden ocurrir los problemas. Alrededor de la adolescente, los hijos están tratando de separarse de sus padres y convertirse en individuos. Los hijos pueden sentirse frustrados e incluso deprimidos o enojados si están demasiado controlados por los padres y no se les permite seguir algunos de sus propios intereses individuales. Es una parte importante de la función de los padres el ayudar a un hijo a convertirse en su propia persona.
Todos vivimos un poco vicariamente a través de nuestros hijos. Nos sentimos orgullosos cuando uno de ellos recibe un reconocimiento, gana un listón azul o sobresale en lo que hacen. Es sólo un problema cuando empujamos demasiado duro y creemos que su éxito es esencial para nuestra felicidad.
Betty Richardson, PhD, RNC, LPC, LMFT, es una psicoterapeuta situada en Austin que se especializa en ocuparse de los problemas de niños, de adolescentes y de padres.
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